Diariamente dentro de una jornada de trabajo en un taller mecánico se pueden oír diferentes tipos de ruidos: pistola neumática, compresor, desmontadora y equilibradora de neumáticos, música, golpes, etc. Este tipo de ruidos se clasifican según su transmisión en ruidos aéreos o en ruidos de impacto. 

Cuando los talleres se encuentran dentro de núcleo urbano, estos deben de estar insonorizados y cumplir con la normativa para no molestar a los vecinos. Entre los ruidos más molestos y a la vez más complicados de atenuar se encuentran los ruidos provocados por los elevadores de vehículos en su funcionamiento. 

Se trata de un ruido de impacto, el cual se propaga muy fácilmente debido a que está sujeto rígidamente a la estructura original de la edificación. Para solucionar este tipo de ruido es necesario la instalación de placas acústicas. 

En SENOR somos especialistas desde hace más de 20 años, en atenuar todo tipo de vibraciones estructurales. Esta solución permitirá que la actividad se pueda seguir ejerciendo, evitando las quejas de vecinos e incluso sus denuncias. 

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